Nadie puede dudar que Natxo Insa fue una de las piezas claves del ascenso del Levante UD la temporada 2016-17. Sin embargo, el centrocampista nacido en Cocentaina, tras subir el equipo, no volvió a vestir la elástica granota ya que se marchó a falta de unos partidos a jugar a la liga de Malasia. Un país donde residía su hermano Kiko, también futbolista, y en el que ambos tenían lazos familiares ya que una de sus abuelas era del lejano país asiático. Una despedida amarga ya que el futbolista afirmó sentirse poco valorado y que no llegó a despedirse de la afición sobre el campo y finalizando la temporada.
Un buen futbolista que le hubiera venido muy bien al Levante en su andadura en Primera División y que se hubiera complementado muy bien como demostró el año pasado con Campaña y Lerma pero también con Dokouré y Lukic. Aunque es cierto que al futbolista alicantino no le van nada mal las cosas en Malasia donde es uno de los jugadores estrellas de la liga local e incluso ha llegado a debutar con la selección malaya. Si, obtuvo la nacionalidad como ya hiciera su hermano dando la curiosa circunstancia de tener dos valencianos en una selección de un recóndito país de Asia.
El ex granota pero también de un montón de equipos como el Eibar, el Celta o el Alcorcón, juega ahora en las filas del Johor Darul Takzim, donde lleva casi un año, y ha ganado tres títulos. Además contará con otro estimulo y es que su club, ha fichado a su hermano Kiko con el que compartirá equipo y vestuario muy lejos de su Cocentaina natal. Un jugador que a día de hoy sería perfectamente válido para el Levante.
