Manu Viana uno de los más destacados del partido de hoy (Foto: José Mocholi)
Ha sido un palo muy duro, eso es cierto. Otra vez la lotería de la tanda de penaltis se ha cruzado en el camino del Atlético Levante y de nuevo ha salido cruz. El filial granota, que ya descendió la pasada temporada de esta forma, ha estado a punto de lograr el ascenso esta mañana pero no ha podido ser. Un único error de Iván Moreno que ha estrellado el balón en el palo, ha privado a los jugadores de Olaizola del ascenso… de momento.
Ahora, lejos de lo que se pudiera pensar después de ver lo afectados que estaban los jugadores al finalizar el encuentro contra el Calahorra, todavía se puede lograr el ascenso. El Atlético Levante, como campeón de su grupo, tenía la oportunidad de enfrentarse a otro campeón, en este caso el del grupo riojano, y en caso de ser eliminado, seguir intentándolo. La victoria en el partido de ida por 1-2 daba muchas esperanzas pero hoy el equipo visitante logró idéntico resultado y se llevó el gato al agua desde los 11 metros.
El equipo de Olaizola deberá superar ahora dos eliminatorias si quiere ser equipo de Segunda B la próxima temporada, algo que como ya hemos explicado, es de gran importancia para el club. Mañana se realizará el sorteo con los campeones que han sido derrotados en esta primera eliminatoria y el resto de equipos que finalizaron en segunda, tercera y cuarta posición en la fase regular que han logrado superar la primera eliminatoria que han jugado. Bola extra para el Atlético Levante que ha perdido una batalla pero todavía no ha perdido la guerra.
